Eskrima práctica. Reflexiones mundanas.

Me considero full-time Eskrimador y blogger. En mi «tiempo libre» y por obligaciones de subsistencia, me dedico al mundo de la seguridad. Agosto es sinónimo de mucho trabajo y esto me ha tenido apartado de lo que realmente me gusta.

Inspiración y proceso. 

He tenido un poco abandonado el blog, no he publicado y esto me molesta. Escribir se convierte en un hábito y si lo dejas, las letras se alejan de tu mente… es un proceso un tanto desagradecido, pierdes el ritmo rápidamente.

Volver a tener inspiración se convierte en una historia basada en la frustración y la causalidad. Te sientas y te levantas de delante de la computadora una y mil veces.

Aunque no haya sido capaz de aburriros con mis historias, no he dejado de vivenciar un sinfín de momentos en las que la seguridad propia se convierte en el pan nuestro de cada día.

Mundología…

El mundo actual

El mundo actual se ha convertido en un lugar complicado de habitar y gestionar. El estado de alerta continuo fatiga otros muchos procesos en los que el ser humano podría volcar su talento.

Después de unas fechas en las que uno vive de cara a la realidad y percibe en directo la escoria del ser humano en su máximo esplendor, se pierde toda esperanza en lo que a la sociedad respecta.

Este mes hemos tenido mucho de lo que hablar. Los atentados terroristas de Barcelona (que vergonzosamente se han politizado), la amenaza general que esto supone y en mi caso particular una Feria de Málaga en la que parece que todo vale aunque nada tenga ya valor.

Actualmente la seguridad propia se ha convertido en una prioridad. Si no lo entiendes, puede que tengas un serio problema.

La experiencia de la realidad, con todo lo sesgada y limitada que puede parecer esta afirmación, se ha convertido en necesaria y extraordinaria a la vez. Puedes llegar a esta experiencia de algunas formas, y todas ellas están en relación directa con el trabajo combativo.

Si no vives nunca en tu vida un proceso de «riesgo real», nunca sabrás donde está la frontera en la que te identificas con la gestión del estrés en relación al arte marcial que profesas, en nuestro caso la Eskrima.

Mabuhay ang Eskrima!

Eskrima y las fronteras de la realidad

Considero que la Eskrima está justo en esa línea delgada en la que cuando necesitas una mente calmada, todo funciona dentro de unos parámetros funcionales y necesarios para gestionar el peligro implicado en un enfrentamiento real.

El trabajo con armas hace que Eskrima tenga un valor incalculable para la seguridad propia. 

La transferencia de otras artes para la Eskrima es importante. Alimentar la realidad con diferentes fuentes, basadas en la experiencia del sparring, el combate, la lucha… bajo una misma dirección es fundamental.

La realidad sólo entiende de distancias.

Para mi las armas son las que transfieren realidad a todas las demás distancias.

Aun así debemos conocer de primera mano que existen circunstancias en las que tenemos que sentirnos cómodos aplicando conceptos de armas a las manos vacías. Básicamente porque en un primer momento no llevamos el arma en las manos.

Os recuerdo una afirmación muy curiosa de mi Maestro Ramón Rubia:

«Eskrima es el arte de las manos vacías con armas»

Si en una situación real nos agarran, nos derriban, nos golpean duro… y las circunstancias no lo permiten, porque básicamente no somos asesinos, no podremos usar nuestras armas (de filo o impacto). Aunque lo deseáramos, las consecuencias serían peor que el problema en cuestión.

Debemos tener presente que todo se reduce a una máxima, «pelearemos como entrenemos». Si no estamos familiarizados con las manos vacías (y es algo que repito mucho dentro del mundillo de la Eskrima), y con las distancias implicadas en ésta: golpeo, clinch, grappling, nos sentiremos perdidos en un mar embravecido y sin horizonte a la vista.

Adaptar tu mente, tus reacciones, tu arsenal técnico a una perspectiva cambiante de armas a manos vacías y viceversa es fundamental para la autodefensa real hoy en día.

Los hombres de verdad pelean con armas, dirían los antiguos… pero de esos hay muy pocos hoy en día.

«de armas tomar»

Realidad y ficción

Hasta aquí y siendo Eskrimadores creo que todos estamos de acuerdo. Ya hemos tratado el asunto en otras ocasiones:

  1. Las peleas reales en la calle hoy en día son multitudinarias, contra gente muy drogada (incluyo alcohol) y con un extremo de violencia que vuelve la mirada a un pasado en el que los límites eran desconocidos.
  2. Las peleas reales son aquellas en las que cualquier cosa puede ser un arma (vasos, botellas rotas, maceteros…), y en las que tener alianzas (con tu gente) y cuidar tus espaldas se convierte en la principal estrategia.
  3. Las peleas reales explotan en cualquier momento y a veces sin tener tú nada que ver…
  4. Las peleas reales nunca son como imaginas y no haces aquello que siempre pensaste poder hacer porque básicamente el tiempo es relativo…

Me preocupa ver cómo la influencia de las MMA, las películas y los video-juegos (haciendo referencia al Teniente Coronel Dave Grossman) hacen de la violencia una cuestión cada vez más profesional.

La gente, aunque no entrene, usa posiciones y acciones que ve y recrea una y mil veces en su mundo virtual. El sentirse relacionados con una violencia gratuita desbocada, cada vez más común y sin freno, es la nueva realidad a la que quiero hacer referencia.

Si no estás preparado, aunque pocas cosas nos preparan, empieza por hacer los deberes. Cambia todo lo que tengas que cambiar y abre los ojos. 

La autodefensa real es agresiva, ofensiva… todo lo demás es un «sin sentido». Una vida, la tuya o la de alguien querido, se puede ir en muy pocos segundos, no hay tiempo que perder.

Termino con una frase del filósofo, psiquiatra y psicoanalista francés Jacques Lacan:

Sólo los idiotas creen en la realidad del mundo, lo real es inmundo y hay que soportarlo.

José Díaz Jiménez

Jose

Expect the unexpected...

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