Las situaciones de supervivencia pueden ser muy variadas. Desde el punto de vista de Eskrima & Fightlosophy apuesto por señalar cuarto factores imprescindibles a los que prestar atención.
Eskrima, como herramienta para la supervivencia, entiende la acción de una forma integral.
Una situación extrema puede venir definida de muchas formas. Desde un desastre natural a algo mucho menos «trascendental» como puede ser la acción directa de seres desaprensivos.
Para definir esta idea, impresa en la Eskrima más tradicional, paso a compartir un texto corto, anónimo, pero de una gran fuerza:
Un estudiante preguntó a su Maestro:
– «Maestro, siempre hablamos de paz, meditamos, pero aun así, enseñas a luchar, enseñas el uso de las armas ¿cómo se pueden conciliar ambos extremos?»
El Maestro respondió:
– «Es mejor ser un guerrero en el jardín, que un jardinero en la guerra».
Pesimismo = Realismo
Con la Eskrima en mente, sinonimo de armas (aunque sea pesimista es muy real), debemos ser conscientes de que en este mundo actual y en un alto porcentaje de posibilidades, no vamos a estar exentos de sufrir algún tipo agresiones físicas y/o psicológicas.
La violencia no es algo del pasado, no es algo de otros mundos, de otras culturas o sociedades. Como diría Javier Sierra:
» Hay otros mundos, pero están en este».
Las personas, desesperadas por falta de recursos, de cultura, de escrúpulos, o simplemente por el echo de querer apropiarse de lo ajeno, entran en estados de violencia muy difícil de gestionar.
4 Tips importantes para la autodefensa:
1. No luches a menos que tengas que hacerlo.
Nunca salgas a buscar pelea. Evitar es fundamental. Parece lógico, pero a menudo veo cierto tipo de actitudes (por ejemplo, por mi trabajo alimenticio, cuando la gente sale de marcha por la noche), me parece importante recordarlo.
Recientemente en la web www.bjjee.com, Jock Willik, un excomandante NAVY SEAL, señalaba que cuando se trata de defensa personal la opción más inteligente es, a ser posible, huir:
«Si alguien me ataca y quiere pegarme o patearme, puedo huir. No me agarran. Puedo alejarme de ellos. Cuando alguien te agarra, o alguien te lleva al suelo, es cuando necesitas técnicas para salir de allí. Si alguien solo quiere pegarme, bueno, me alejaré de ellos o huiré de ellos. Está bien. […]
Ahora, algunas personas podrían pensar: «Bueno, Jocko, no quiero huir si alguien quiere pelear conmigo. Quiero luchar contra ellos «. Bueno, pensemos cómo podría terminar eso para ti. No. 1: No sabes si esta persona tiene un arma o no. ¿Y si tienen un cuchillo? ¿Y si tienen una pistola? ¿Y si tienen tres o cuatro amigos? Ahora estarás recibiendo disparos, apuñalamientos, mutilado y/o asesinado. ¿Eso no es lo que estás buscando el viernes por la noche mientras caminas por la calle?
Ok, entonces digamos que eres más fuerte que el otro tipo – no tiene un cuchillo, no tiene un arma, no tiene amigos – y le pegas y le rompes el brazo, lo estrangulas y lo pones a dormir. Bueno ahora ¿adivinas qué te va a pasar? Te van a arrestar, te van a demandar. Ahora vas a tener que pagarle mucho dinero a esa persona a la que has querido pegar.[…]
Obviamente, si alguien te está atacando a ti o a alguien de tu familia y tienes que intervenir para defenderte, bueno, es por eso que continúas entrenando todo el tiempo, porque eso podría suceder, y tienes que estar preparado para eso. […] «
2. Hay que suponer que van armados.
Una gran herramienta para tu arsenal es tener claro que pueden llevar armas.
Hay que estar preparados para ello. Esto significa «haber entrenado lo suficiente bajo presión» (es como se forman los diamantes). Haber entrenado combativamente.
Utiliza el elemento sorpresa, no des señales de debilidad, tampoco muestres tus armas demasiado pronto.
Recuerda: «todo cambia cuando hay armas implicadas», si luego no las hay, mejor que mejor.
Por ejemplo, si entrenas BJJ, Boxeo, Thai… y te interesa la autodefensa, añade de vez en cuando algún juego (contexto sparring) en el que haya una daga implicada, sal de tu zona de confort.
Más te acercas a la realidad, más relación con la violencia, más herramientas para sobrevivir.
3. No juegues a las «películas de artes marciales».
Si, como ya hemos hablado, asumimos que tus adversarios portan armas, no sería nada inteligente tan sólo usar tácticas de MMA, de BJJ, de Thai, de Boxeo o de sabe dios qué… (son grandes artes combativas pero presuponen un contexto de duelo deportivo). Esto podría dejarte en una posición vulnerable ante una agresión múltiple (la mayoría suelen ser así).
Las pelis a lo «Bruce Lee» frente a diez tipos y patearles el culo a todos son eso; películas fantasías, coreografías… y así deben ser vistas.
Os lo puedo asegurar, cuando la cosa se pone realmente fea, todos; y digo todos, echan mano de armas. Da igual lo que sea, un vaso, una silla, una muleta, una mesa, una botella, un puño americano…
En estas situaciones utilizar el engaño como herramienta te ayudará y te alejará del desastre total, juega tus cartas.
Recuerda la regla básica en Eskrima: «un buen posicionamiento te dará un buen movimiento».
Mantente en pie todo el tiempo posible, observa vías de huida, no des la espalda, mantente alerta.
Usa tus desplazamientos, visión periférica, estrategia, coraje, violencia, agresividad y sobre todo USA TUS ARMAS.
4. Cuando hay armas involucradas, lucha sucio.
Muchas personas, tanto dentro como fuera del mundo de las artes marciales, creen en un concepto buenista y descontextualizado: «la lucha justa o equitativa«, lo cual puede llegar a limitarnos.
Cuando tu vida está en peligro se debe hacer lo que sea necesario para sobrevivir, incluso si eso significa abandonar el concepto clásico de ser un caballero.
Si no tienes claro esto y piensas que el otro va a ser todo un «gentlemen» contigo prueba a verte en una situación real y luego me cuentas qué te ha pasado.
«Jugar sucio» (lo desarrollaré en otra entrada), «no ser políticamente correcto», en un enfrentamiento físico dentro de un contexto extremo solo significa que valoras tu vida lo suficiente como para darlo todo.
Y por último dos tip que trataré con más detenimiento en una entrada futura, pero que merece la pena tener presente, así de forma esquemática:
«PREVENIR | LUCHAR | SOBREVIVIR»
«HUIR | ESCONDERSE | LUCHAR»