Programaciones obsoletas en Eskrima.

El reto hoy en día (al menos para mi) es deshacerse de todo lo que ya no nos sirve, desechar esas programaciones obsoletas que se han ido instalando de forma furtiva dentro de un cerebro (el nuestro) sobre-estimulado de tanta información.

Eskrima y hazañas.

Propongo, imagino, creo que volver a la simpleza es quizás una de las mayores hazañas que uno puede realizar en el camino de la vida y en la Eskrima.

Hace nada veía en las redes sociales cómo unos personajes en plena expansión mediática, protagonizaban vídeos y series técnicas con el título de: «único estilo probado en la calle«. Se me vinieron a la cabeza mil cosas y una pregunta: «¿¿de donde han salido estos estafadores??».

Cada vez más proliferan grupos de personas encerrados en sus fantasías, encandilados con promesas de invencibilidad, malgastando su tiempo en aprender a «morir rápido». Defensa contra cuchillos (de plástico), defensa contra pistolas (de plástico), defensa contra varios atacantes (¿de plástico?). Con 14 añitos yo hacía eso y pensaba: » joder soy un máquina «, entonces con el tiempo y muchos porrazos a mis espaldas me di cuenta de ciertas cosas. Desde esta posición ves tipos que «peinan canas» creyéndose y haciendo este ridículo tan extremo a lo «Urban Rambo» y sabes que o el fin del mundo está cerca, o que definitivamente el ser humano no tiene remedio se mire por donde se mire.

Nuestra infancia ha estado bombardeada por películas, comics, series, etc … en las que al artista marcial se lo tildaba de un «todo lo puede«, siempre vencía y se llevaba a la cama a la chica más guapa. Muchos, evidentemente no han querido madurar y han preferido quedarse en ese mundo de lujuria castrada.

El problema viene cuando estos «super héroes» narcisistas se creen en el derecho de imponer su criterio. Tratan de afirmarse en base a crear federaciones, regulaciones y organizaciones ajenas a la realidad. Ni qué hablar de lo que se ve en el mundo de la «Eskrima«.

Expectativas y Eskrima.

Crear expectativas bochornosas ante una demanda obsoleta de super-poderes me parece muy ruin. Los verdaderos Eskrimadores (los pocos que he conocido) siempre han sido gente despierta y desprovistas de la necesidad de limitarse por tendencias absurdas, básicamente porque hacen combate (o no serían tan Eskrimadores). Mentes críticas que analizan todo porque de ello depende su vida (o la de sus seres queridos). Los que pretenden el monopolio de la verdad a través del engaño son aquellos que dan rienda suelta a la fantasía de sus negocios. Como dijo Krishnamurti: » todo lo instituido se torna putrescible «.

Para mi está claro, hemos entrado en una etapa en la que todas estas programaciones se han quedado obsoletas, la realidad clama por sí misma, estas programaciones, estas limitaciones dictadas por la «franquicia del facilismo«, dejarán de tener sentido cuando te des cuenta de que es a tu vida a la que ponen fecha de caducidad. Es fácil comprobarlo. Acércate a lo auténtico por un instante, pelea, haz combate, te vas a llevar una gran sorpresa. Y por cierto, por si aun no te has percatado de ello: no todas las sorpresas que nos llevamos en la vida son agradables.

José Díaz Jiménez