Pseudo Eskrima y esas cosas.
Hoy es un día de estos de verano de calor insoportable, por otro lado no queda otra que aceptarlo viviendo donde vivo, si esto se llama «La Costa del Sol», por algún maldito motivo será, no sé si es precisamente la temperatura o el efecto producido por un buen café de Colombia, eso sí, ecológico y con mucho hielo, que mi mente ha comenzado a divagar y a recordar situaciones que me hacen construir poco a poco la idea de una nueva entrada para este humilde blog. Si quieres saber qué es la Pseudo-Eskrima no dejes de leerlo.
Eskrima y sus corruptelas.
En esta época en la que vivimos de tantos guías falsarios y mercaderes en el ámbito del espíritu, en el Arte, en la Lucha, en la vida misma y en el que proliferan tantos maestrillos narcisistas y corruptos, resuenan en mi mente unas palabras que hace ya años me decía un amigo de oficio sacerdotal parafraseando a su Dios Jesús:
«Son ciegos que guían a ciegos. Y si un ciego guía a otro ciego, los dos caerán al hoyo».
Me preguntaba el «Señor Eibol» en una clase de esas privadas que tengo el honor de darle (son grandes momentos de desconexión donde el tiempo siempre es relativo), a las faldas de la Alcazaba de Málaga, si me molestaba que me llamara Maestro y no es que me moleste, es que me entristece.
Evidentemente él no lo hace con ninguna intención más que la de el respeto y la amistad que nos une, pero sin lugar a dudas y profundizando un poco en este tema; hay tan pocos buenos Maestros y tanto farsante, que humildemente no me puedo considerar de los primeros y a los segundos, como todos sabéis, les tengo la guerra declarada.
Tragedias y sometimientos.
La tragedia a la que se ve sometida la Eskrima en todo el mundo, es que se ha visto envuelta en el culto circense del fantaseo grotesco irracional de personas con muy pocos escrúpulos y que se creen sabedores de algún tipo de verdad por ciencia infusa.
Cuanto más observo el mundo de la farándula, más claro me queda que todo esto se ha convertido en un supermercado de Pseudo-Artes, ¿por qué? muy simple, porque el ego es muy promiscuo y la fama muy puta, ésta necesita cambiar constantemente de técnica, de métodos y de posturas.
Siempre insaciable ella, hará un estilo y luego otro estilo, se irá con el que más le ponga y luego lo mezclará a su entender sin sentido alguno, al final no se sabrá ni de quien es el hijo bastardo que saldrá de tanto desorden orgiástico.
Es como la persona que busca agua y hace pequeños hoyos en la tierra y nunca encuentra agua, en vez de ahondar en un sólo espacio y encontrar finalmente el agua anhelada.
La gente tiene tanto afán de notoriedad que hace lo que sea (poniéndose en evidencia el 100% de las veces) para crearse un nombre, una fama… en definitiva un reconocimiento, una perpetuación de su Ego.
Al principio todos andamos en esa necesidad de inventar o incorporar, y no nos damos cuenta que lo que es auténtico no necesita incorporar absolutamente nada.
Bailando ando.
- Es cierto que puedes hacer Eskrima y bailar salsa, PERO NO EXISTE LA ESKRIMA-SALSA o la Salsa Eskrima!
- Es cierto que puedes hacer Eskrima y trapecismo, PERO NO EXISTE LA ESKRIMA-TRAPECIO o la Trapecio-Eskrima! ( aunque viendo algunos vídeos que circulan por las redes, al circo fijo que podrían ir más de uno…y más de dos !!!!).
Al final el Pseudoarte o como también me gusta llamarlo «la cultura de las masas» (que conmueve solo superficialmente), pretende maquillar esa realidad que no a todo el mundo gusta ( decía el Dalai Lama que la gente no mira hacia dentro, que no mira su realidad, porque lo que encuentran siempre es mucha oscuridad)…
El verdadero Arte (que no me discúlpen los ofendidos) no es para todos y es ahí, justo en esa grieta, en ese pliegue, donde incide directamente el Pseudoarte.
Hablamos así de una «realidad» que posiblemente no entiendan y que sobre todo no saben plasmar, una «realidad» que adornan y recargan de sandeces, posiblemente porque no son capaces de ir al origen, de dirigir su camino hacia la simplificación.
Así y ante el pavor que les produce el trabajo duro y la búsqueda personal, toman el camino fácil del mercadeo y la mescolanza ególatra y sin sentido, aparecen así «Artes» en escena a las que añaden apellidos tan grotescos como absurdos, tan ridículos que de por sí no se sustentan bajo ningún tipo de lógica, el/los apellidos que más rechinan en mi mente son cuando ponen «Modern» (¿Eskrima moderna?, ¿¿a qué se referirán??) o peor aun, le ponen su propio nombre – «periquito de los palotes Eskrima.»
Curioso asunto, porque si estos Pseudo-maestrillos mirasen un poco más allá de sus narices, si se dignaran a buscar, correrían el tremendo riesgo de encontrar que para los antiguos Eskrima era Eskrima, tal cual, y que por lo tanto, el sentido que le damos nosotros a un estilo, dentro de nuestra cabeza cuadriculadamente occidental, no es ni por asomo parecido a lo que ellos entienden al respecto.
Por nombrar a algunos de los «estilos» más conocidos y como simples ejemplos de pura lógica y sentido con respecto a como sus integrantes se referían a ellos, podemos citar
- Balintawak Eskrima; su nombre viene de la calle donde estaba el sitio donde entrenaban,
- Doce Pares era un Club, tal cual, donde muchos guerreros, de los de verdad, no de los mal paridos por youtube, se reunían y se pegaban, compartían.
- A Tatang Ilustrisimo cuando le preguntaron por primera vez sobre su estilo no sabía a qué se referían y decía a lo más que eso que él hacía era Eskrima/Arnis (no Kali)
- …
Así podría citar a unos cuantos más y luego vienen los Maestros de la new age marcial, con sus viajes a raticulín ida y vuelta bajo el auspicio de sus onanismos marciales y tienen la cara dura de poner nombre y apellido a su nuevos grandes estilos mejorados, ultra-modernizados para el momento más actual, de chiste de mal gusto vaya!
Eskrima sin apellidos.
Para mi la «Eskrima verdadera» no tiene apellidos, es aprender a ir más allá de los adoctrinamientos, de los filtros que te encasillan en estilos y organizaciones tiranas. Es despojarnos de todo lo que hemos adquirido bajo el yugo de otras Artes y de otros falsos profetas marciales, para convertirnos en lo que realmente somos, es ahí donde está el camino.
Eskrima (que para mi no es más que un sinónimo de la lucha real) al fin es ser lo que nunca has dejado de ser, lo que realmente eres a través de como te expresas en la lucha con armas.
Solo llegas a saber quien eres cuando sales de tu zona de confort y te enfrentas a tus miedos cara a cara (es decir: pelear, poner en práctica, sin egos, sin pensar en resultados…), de esta forma puede que no te gustes a ti mismo, puede que no luches como querías, puede que te frustres, que quieras abandonar, que te golpeen duro o por contra que de repente pienses que avanzaste mucho y todo empiece a tomar sentido. Ok, enhorabuena, eso se llama madurez y solo hay un camino para lograrlo: entrenar duro.
Por eso y como he dicho muchas veces, en Eskrima no hay que hablar de aprender y acumular, sino de desaprender y despojarte, de irnos quitando infinidad de capas, irnos quitando mochilas que adulteran nuestra auténtica percepción de lo que significa la lucha real.
Sin ser nadie para dar consejos y como último apunte de esta entrada, recomendaría muy especialmente alejarse de esos que dicen que si no haces las cosas como ellos no estás en el verdadero camino, porque cuanto más griten sus alabanzas, más se engañan y más se pierden en sus miserias.
MAGISTRAL José (así con mayúsculas).
Muchas gracias Oscar ! Como digo, guerra declarada a los impostores.
Como siempre chapeau, lo has bordado y no veas (dentro de mi supina ignorancia) como comprendo eso de tener que beber de muchos brebajes, para intentar ir aprendiendo, pero eso para mi desgracia me hace perder mucho tiempo, que no tengo, pero es lo que hay por aquí donde vivo.
De todos modos gracias por tus escritos y razonamientos porque para mí al menos es una luz que anima a buscar y encontrar la salida al túnel.
Me dejas sin palabras, muchas gracias por el comentario…hay que buscar, porque el que busca, aunque a veces no sepa exactamente el qué…algo encuentra en el camino 😉