En esta entrada quiero centrarme en los aspectos físicos – deportivos del entrenamiento para una Eskrima integral, funcional y que tenga sentido con el objetivo primordial del arte que es, en definitiva, la supervivencia.
Considero un debate muy interesante el de si hay o no que fijar la atención en el entrenamiento físico para nuestra Eskrima.
Para mi está muy claro:
Es tan importante el entrenamiento de la fuerza, resistencia, elasticidad y, en definitiva, el desarrollo de los atributos fundamentales para el combate, como el ir adaptándonos a las necesidades y circunstancias fisiológicas en las que nos encontremos con el paso inexorable del tiempo.
Habilidades que duran en el tiempo.
Donde hubo retuvo. Si bien es cierto que he encontrado a grandes maestros con habilidades técnicas impresionantes para su avanzada edad, también es cierto que en su juventud, fueron auténticos atletas.
¿Qué quiero decir con esto?
Simple, Eskrima tiene unas características tácticas muy finas en las que la energía aplicada no es necesariamente externa.
A pesar de ello, todo enfrentamiento real lleva consigo una fisionomía combativa, una afectación física y emocional que mermará en ciertos aspectos nuestra capacidad de supervivencia.
Combatir es moverse. Y si te mueves tu cuerpo necesita estar preparado. No hay mucho más que saber. Cuanto más y mejor hayas focalizado tu entrenamiento en todos los rangos necesarios para la lucha, mejor será tu capacidad de respuesta y gestión.
Cultura del movimiento.
Si hay algo que quisiera destacar es que me parece importante centrarnos en los aspectos del «desarrollo de movimiento integral». Esa cultura del movimiento que se enraíza en diferentes artes y que no tiene límites aparentes será de gran ayuda para nuestra Eskrima.
Os dejo una serie de pequeños vídeos de cómo me gusta a mi particularmente trabajar el aspecto físico – deportivo para mi Eskrima.
Los he ido subiendo a instagram sin ningún orden, no es mi idea. Aquí he pretendido ordenarlos un poco.
Cuando hago estos ejercicios pienso concretamente en mis alumnos, en qué pueden sacar de beneficioso en ello y en una forma saludable y dinámica de entender nuestro cuerpo desde la movilidad y la coordinación. Uso el arma en la mayoría (si no todos) de los ejercicios. Pretendo así estrechar la relación del estudiante con sus herramientas aunque es bien cierto que no sería necesario.
El movimiento es la clave.
Me gusta recalcar que lo interesante es llegar al punto del mestizaje, «la fusión sin confusión«.
1. Empezamos con ejercicios a «ras de suelo».
Influencias claras de mi entreno en BJJ e inspirado en el trabajo de Bioginástica y demás artes relacionadas con el movimiento. Nada nuevo, algo creativo, mucho entreno.
Obsesión por el movimiento.
2. Sigo con una serie de ejercicios que comienzan en pie…
… y o bien nos vamos al suelo o nos quedamos ahí arriba. Capacidades de reacción, equilibrio, resistencia… con y sin compañero.
Si os ha inspirado en algo para vuestro propio entrenamiento entonces he logrado mi objetivo con esta entrada.
Lo más atractivo del movimiento es que no tiene límites ni nombres.
Es importante tener un foco determinado para nuestro entrenamiento y utilizar la herramienta fundamental, nuestro cuerpo, es todo un privilegio.
Iré añadiendo más material, el objetivo: acordarme yo mismo de qué voy trabajando con mi mente. Y si de camino podéis hacer algunas cosas y mejorarlas, pues mejor que mejor!!!!
José fantástico!!!!!!!
Muchas gracias caballero. Ese café se hace necesario ya no?? Nos vemos pronto.
Simplemente mi mente se abrió a nuevas formas de entrenar gracias José por compartir un abrazo desde chile
De nada, un fuerte abrazo.